Durante tantos años practicando y enseñando Yoga, hemos comprobado que la mayoría de las personas recurren a esta ciencia en busca de respuestas trascendentales más que por la necesidad de hacer ejercicio. Respuestas a preguntas importantes en determinado momento que son de vital importancia para descubrir, recordar, reafirmar y aprender.

Ante tales circunstancias resulta importante abordar la “Shanga”, un término con origen en el Sánscrito que hace referencia a un grupo que se reúne para promover y mantener consciencia —o actos conscientes. En otras palabras: la comunidad de practicantes de la ciencia del Yoga.

En ese sentido, la Shanga es vital dentro de la práctica, ya que resonarás más con la comunidad de un espacio u otro según las energías. Recuerda que atraemos lo semejante y es importante aprender con y de los demás. Finalmente la ayuda mutua y la devoción hacia el camino del otro es muy relevante para compartir dentro de la práctica. Om Asata Sadgamaya: “Condúcenos de lo Asat (lo verdadero, simple e infinito) a lo Sat (falso, ilusorio y parte del Maya). Un verso que nos recuerda la importancia de poner atención en lo que se da y se recibe, intentando siempre compartir lo más luminoso de nosotros mismos.

Ahora que te familiarizaste con este concepto, te recomendamos que no solo entres y salgas de la sala. Comparte libros, interactúa con tus compañeros, realiza una labor en pro de tu equipo de práctica. Cualquier detalle siempre es agradable y seguro te ayudará a encontrar gente nueva con historias fantásticas por compartir.